La contaminación por NO2 repunta hasta en un 35% en el inicio de la desescalada. El uso de guantes y mascarillas desechables incrementa los residuos no reciclables que pueden acabar en mares y océanos

Las noticias no son buenas. Con esto, desde ElTiempo.es llaman a una “nueva normalidad” en la que se respeten los colores originales del planeta por el Día Mundial del Medio Ambiente

Con motivo de la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente el próximo 5 de junio, el soporte meteorológico digital eltiempo.es ha querido mostrar cómo la acción antropogénica y el calentamiento global han cambiado los colores del planeta.

Con la desescalada, en A Coruña, Bilbao, Gijón, Ourense, Santander, Sevilla, Tarragona y Zaragoza la contaminación por NO2 ha aumentado entre un 15% y un 35% respecto al mes pasado

Durante el confinamiento, la contaminación por NO2 cayó entre un 30 y un 75% en las ciudades españolas comparado con el mismo periodo del año 2019. Además, la reducción respecto a años anteriores fue de más del 50% en las ciudades españolas con mala calidad del aire. «En la capital, la contaminación por NO2 llegó a caer en las dos primeras semanas del confinamiento más de un 60%», indica Irene Santa, meteoróloga de eltiempo.es.

Con la desescalada, en A Coruña, Bilbao, Gijón, Ourense, Santander, Sevilla, Tarragona y Zaragoza la contaminación por NO2 ha aumentado entre un 15% y un 35% respecto al mes pasado. Además, Barcelona y Madrid, que son las ciudades que suelen tener mayor contaminación también han visto aumentar la contaminación al iniciarse la desescalada, incluso dentro de la propia Fase 0, con un aumento del 31 y 24%, respectivamente.

Se estima que el 80% de la basura que hay en el mar son plásticos, siendo la mayoría de ellos plásticos de un solo uso. «En plena guerra contra este tipo de plásticos nos hemos visto envueltos en una pandemia cuya lucha nos exige el uso de mascarillas y guantes desechables, que no pueden reciclarse», apunta Santa, que llama a la conciencia en este sentido, ya que para el año 2050 podría haber más plástico que peces en el mar.

La huella del cambio climático y el calentamiento global también está alterando los colores de nuestro planeta.

En el último año se han difundido varias imágenes de la Antártida con nieve «verde». El verde de unas algas que proliferan cuando las temperaturas en la zona se disparan. De hecho, el pasado 9 de marzo, en la base argentina Marambio, ubicada en la isla Seymour, se daba una temperatura de 20,75ºC. «Estas temperaturas no son habituales en la región», informa Mario Picazo, meteorólogo de eltiempo.es y experto en cambio climático.

El impacto del cambio climático en el color de los corales es otra de las evidencias más visibles del aumento de la temperatura de los mares y océanos. “Es clave mitigar los efectos del calentamiento global y no exceder 1,5ºC de calentamiento a mediados de siglo. Si se elevasen a 2ºC, todos los corales del mundo podrían desaparecer en 2100”, señala Mar Gómez, doctora en Físicas y responsable del área de meteorología de eltiempo.es.

Según la National Oceanic and Atmospheric Administration (NOAA), entre 2014 y 2017 aproximadamente el 75% de los arrecifes tropicales de coral del mundo fueron víctima de esta situación. La pérdida de los corales tiene un impacto directo en el ecosistema que alberga, así como en el equilibrio entre las especies que allí habitan, además de servir de muros naturales para frenar los impactos del fuerte oleaje en las zonas costeras.

Recientemente, varios meses consecutivos se han colado en los ranking de los más calurosos desde que hay registros. La progresiva desertificación también se aprecia en España, donde la escasez de precipitaciones también acelera este tipo de climas áridos en el sudeste del país y semiáridos en más de la mitad del territorio español, según Gómez.